Se encuentra una mujer orando y le dice a Dios:
Dios, tú sabes cuánto deseo casarme, consígueme un hombre inteligente.
Le contesta Dios:
Hija, eso si que está difícil, pues los hombres inteligentes, no se casan.
Dios, tú sabes cuánto deseo casarme, consígueme un hombre inteligente.
Le contesta Dios:
Hija, eso si que está difícil, pues los hombres inteligentes, no se casan.